Taller Arcángel Fernández

El taller abrió sus puertas el 1 de julio de 1957. Arcángel Fernández, después de haber aprendido el oficio de ebanista en uno de los más prestigiosos talleres del barrio de Salamanca, y habiendo trabajado como guitarrista flamenco conoció al gran constructor de guitarras Marcelo Barbero.
En aquel tiempo, principios des los años cincuenta, Marcelo Barbero era considerado como el mejor constructor de Madrid, heredero de la escuela del insuperable Santos Hernández. Durante un año y medio, Marcelo Barbero contrata al joven Arcángel como ayudante. Este participa en el proceso de construcción preparando piezas, haciendo los remates de los instrumentos e incluso algunas reparaciones. Sin embargo no construyó ningún instrumento en su totalidad durante esta temporada. Al fallecimiento de Marcelo en marzo del 1956, él se encarga de acabar las guitarras ya empezadas por su predecesor y construye sus primeros instrumentos bajo la firma de la viuda de Marcelo Barbero. Muy pronto, gracias a su talento y su rigor, Arcángel adquiere una gran notoriedad en los círculos guitarrísticos tanto en España como en el extranjero.
Pocos años después, el hijo de Barbero, Marcelo Barbero (hijo), entra al taller y juntos trabajaron durante 40 años.

Durante todos estos años, la "Casa Arcángel Fernández" era al mismo tiempo taller y tienda , que además de sus propias guitarras, proponía también otras de los - en aquel entonces - jóvenes constructores Manuel Cáceres, Lorenzo Alvarez, y Félix Manzanero, entre otros .
Desde 1997 hasta el 2011, Arcángel Fernández tuvo como colaborador en la construcción de sus instrumentos a Don Manuel Cáceres.
Grandes guitarristas como Paco de Lucía, John Williams, Alirio Díaz y modernos como Irene Arutyunyan, Alejandro Aznavwrian y Grisha Goryachev han interpretado su música con el unico sonido de una guitarra Arcangel Fernández.